jueves, 6 de octubre de 2011

Algunas canciones rusas


En estos últimos días, mi crisis aguda de rusofilia se ha visto agravada por un acceso de iMovie. Así que, entre Turgueniev y Tolstoy, me estoy pasando las horas muertas traduciendo canciones y creando, con escaso talento, ya lo sé, videos musicales con algunas de mis joyas discográficas.

Empecemos con este sencillo y precioso poema de Brodsky, que la cantante y poeta Elena Frolova convirtió en una evocadora canción, llena de melancólica alegría.
La sencillez del poema, sin embargo, se torna dificultad a la hora de traducir el primer verso. En ruso,  los verbos en pasado concuerdan con el género, por lo que desde el primer verso el lector ruso sabe que habla una mujer. ¿Cómo traducir eso al español? La solución, que ahora me parece tan sencilla, me ha costado horas encontrarla (¡hace tanto que no traduzco!), y aun así no me satisface de lo prosaica que suena.
Y por si eso fuera poco, cabe señalar que en ruso, mientras que un hombre "se desposa", una mujer "sale tras un hombre". Y aunque en la intención del poeta quizá no entrara este matiz, éste está ahí.


Зимняя свадьба
Я вышла замуж в январе.
Толпились гости во дворе,
и долго колокол гудел
в той церкви на горе.

От алтаря, из-под венца,
видна дорога в два конца.
Я посылаю взгляд свой вдаль,
и не вернуть гонца.

Церковный колокол гудит.
Жених мой на меня глядит.
И столько свеч для нас двоих!
И я считаю их.

Boda en invierno

Mi marido y yo nos casamos en enero
y mientras los invitados se agolpaban en el patio
desde lo alto de la colina
la campana no dejaba de tañer

Desde esta capilla se ven
los dos extremos del camino
miro a lo lejos
el mensajero ya no volverá

La campana de la iglesia tañe sin cesar
mi marido me contempla
¡cuántas velas por nosotros dos!
y yo las cuento todas


La siguiente es una canción tradicional rusa. Cada vez que oigo el estribillo, epítome del romanticismo, no puedo evitar imaginarme a un héroe pushkiniano que, desolado tras oír que su amada la princesa Elizaveta se va a casar con un hombre más respetable y acaudalado al que no ama, se empeña en perder en el juego hasta el último kopek, y al salir le espeta al cochero "llévame adonde quieras".
Está interpretada por un excelente grupo ucraniano llamado Iva, que conocí en las calles de Varsovia y a los que, por suerte y contrario a mi costumbre, les compré dos cds. No he vuelto a saber de ellos.
El vídeo muestra imágenes de San Petersburgo.



Ямщик, не гони лошадей,

Как грустно, туманно кругом,
Тосклив, безотраден мой путь,
А прошлое кажется сном,
Томит наболевшую грудь.
Ямщик, не гони лошадей,
Мне некуда больше спешить,
Мне некого больше любить,
Ямщик, не гони лошадей.
Как жажду средь мрачных равнин,
Измену забыть и любовь,
Но память - мой злой властелин
Всё будит минувшее вновь.
Ямщик, не гони лошадей...
Всё было, лишь ложь и обман,
Прощай и мечты и покой,
А боль не закрывшихся ран
Останется вечно со мной.
Ямщик, не гони лошадей...
Cochero, no fustigues a los caballos

Qué triste niebla me envuelve,
camino por la melancolía y la desolación,
y el pasado me parece un sueño
que atormenta mi dolorido pecho.
Cochero, no fustigues a los caballos,
ya no tengo prisa por llegar a ningún sitio,
ya no tengo a quien amar,
cochero, no fustigues a los caballos.
Cómo anhelo, en las lúgubres llanuras,
olvidar el amor y la traición,
pero el recuerdo, mi perverso amo,
evoca de nuevo lo pasado.
Cochero...
Era todo engaño y mentiras,
digo adiós al sosiego, a mis sueños,
pero en mí quedará por siempre
el dolor de las heridas abiertas.


Stenka Razin, pintado por Vasily Surikov

La letra de la siguiente canción, que es todo un himno en Rusia, es de un poema de Dmitri Sadovnikov (1847-83) basado en una leyenda sobre el  guerrero cosaco Stepan (también Stenka) Razin, quien en 1670 lideró una revuelta contra el gobierno y el ejército del zar. No es de extrañar que acabara como acabó, descuartizado vivo junto a su hermano en la Plaza Roja.
Transcribo sólo el emocionante estribillo final que dice "¡Volga, Volga!"
La melodía no deja de recordarme a una habanera catalana.



Из-за острова на стрежень

"Волга, Волга, мать родная,
Волга, русская река,
Не видала ты подарка
ОT донского казака!

¡Volga, Volga, amada madre,
Volga, río de Rusia,
si hubieras visto el regalo 
que te hizo el cosaco del Don!


El siguiente tema es una canción tradicional siberiana titulada Moroz ("Helada"), de la que no he conseguido la letra. Está interpretada por Loyko, cuya foto encabeza esta entrada. Se trata de un trío de virtuosos músicos gitanos acompañados en esta ocasión por Leonsia Erdenko, de voz absolutamente cautivadora. Loyko, que se disolvieron hace unos años, afortunadamente se han vuelto a reunir -no sé si de manera más o  menos permanente- y en octubre actuarán en Barcelona; naturalmente, ya tengo mi entrada.
Esta preciosa canción, a la que he puesto imágenes de Siberia, cuenta la historia de un hombre que, engañado por su mujer, se va de casa y vaga por la nieve, pues volver al hogar sería una humillación y un deshonor.


Y por último, y porque en la variedad está el gustirrinín, una canción alegre. De nuevo estamos con el grupo Iva, por los que siento absoluta debilidad, y que aquí cantan al orgullo y la alegría de ser gitano. Siento haberles cortado la cabeza a esa pretérita pareja que hay en el vídeo.

3 comentarios:

  1. Qué alegría me mas dado, amigo Batboy, esta mañana. Hasta lo que alcanza mi ruso es buena tu traducción, pero mucho mejor aún que ella es el favor que nos haces a todos los eslavófilos de saborear esa lírica, que es como un trocito de nuestra querida Rusia.
    Un saludo.
    Y ojalá que tenga continuidad esta iniciativa tuya.

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  2. Madre mía. Me acabo de quedar patitieso. Ent la primera foto y los textos en ruso me has dejado en el limbo. Ademas de la literatura rusa soy tremendamente admirador de la música clásica de autores rusos, especialmente del siglo XX (Prokofiev y Shostakovich son pasión para mi) y la ópera rusa. Es a lo mas que llego. El ruso me parece (externamente, claro) un idioma extremadamente atractivo. De hecho acaricié la idea de estudiar ruso o japonés. Intenté el japonés y bien pronto me di cuenta de lo estéril del esfuerzo limitado que podía afrontar. El ruso no lo intenté, pero ahora vuelve a darme pena. Me alegro de saber que si o encuentro traducción de algún pasaje de Boris Godunov (que pedazo de ópera) puedo recurrir a ti.
    Las canciones son extraordinarias.

    Un saludo.

    PD ¿IMovie?. ¿También compartimos tendencias informáticas de la manzana?

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  3. Cómo me alegro, amigos, de que os hayan gustado. La verdad es que yo me lo he pasado pipa haciendo los vídeos, buscando las letras, traduciendo y perdiéndome por páginas rusas.
    La música tradicional rusa, la música gitana de Europa del Este y la música klezmer son una de mis pasiones, y de mis viajes por esas tierras tengo no muchas pero sí muy valiosas joyas. Y creo que esta iniciativa tendrá continuidad, Ricardo.
    La música clásica rusa también es una de mis debilidades, en concreto Mussorgsky (tuve la suerte de ver Boris Godunov hace unos años en Barcelona) y Shostakovich. Prokofiev no lo conozco tanto.
    Y sí, Óscar, compartimos también alguno de los productos del gran Jobs.
    Saludos.

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